El cambio de energía que comenzó con la colecta para pagar la deuda del club por iniciativa del influencer Santiago Maratea se manifestó en el primer tiempo con una doble tapada milagrosa de Rey en la misma jugada: manotazo, travesaño y tapada con la rodilla en la línea de gol ante un cabezazo de Ávalos y el rebote tomado por Rodrigo Cabral.
El público local reclamó que el árbitro Nicolás Ramírez no revisara en el VAR si la pelota había ingresado en el arco y desde entonces estuvo exageradamente enardecido.
El equipo de Gabriel Milito se contagió del nerviosismo y Rey volvió a agrandarse ante un cabezazo con destino de gol de Marco Di Césare.
De forma impensada, el “Rojo” estableció la apertura al capitalizar un error de salida. Ortíz le “comió” las espaldas a Matías Vera en el semi círculo del área y definió al palo derecho con precisión.
Argentinos mantuvo en el segundo tiempo una posición más ambiciosa en el campo, dominó los porcentajes de tenencia de pelota pero el “Rojo”, digno equipo del “Ruso” Ricardo Zielinski, nunca perdió el orden táctico para contener su avance.
Ámbito
