Un equipo de investigación internacional encabezada por académicas de Argentina y Estados Unidos presentó los resultados preliminares del estudio que realizaron sobre los primeros 30 juicios por jurados en el Chaco.
Las primeras conclusiones fueron compartidas por Valerie Hans (profesora de la Universidad de Cornell en Nueva York, EEUU, investigadora y consultora sobre implementación del juicio por jurados en todo el mundo) y Aldana Romano (directora del Programa de Organización y Gestión Judicial e integrante de la junta directiva del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales -INECIP-) en una jornada que tuvo lugar en el salón auditorio del Superior Tribunal de Justicia y fue auspiciada por la Embajada de los Estados Unidos.
Allí estuvieron presentes el presidente del STJ, Víctor del Río, su par Emilia María Valle, el procurador general Jorge Canteros, la defensora general Alicia Alcalá, los presidentes del Consejo de la Abogacía de Resistencia, Ricardo Urturi, y del Colegio de Abogados de Resistencia, José Galassi, agentes judiciales, abogadas, abogados y público en general.
“Forma parte de la cultura”
En la apertura, Del Río, remarcó que el juicio por jurados “hoy parece casi normal en nuestra provincia, parte de nuestra cultura” y pidió recordar que “no fue tan simple”. En ese sentido remarcó el acompañamiento que hubo desde el STJ y agentes judiciales de todos los niveles que se sumaron en forma voluntaria a “un compromiso que fue de muchos”.
También destacó la presencia de Hans” a quien definió como “la mayor especialista mundial” en la materia” y señaló que trabaja con el Chaco desde antes de la implementación de la ley de juicio por jurado.
“Nos anticipó las ventajas de transformar un sistema de justicia penal con la participación popular”, explicó Del Río.
Resultados preliminares
Posteriormente, Hans y Romano, presentaron los resultados preliminares obtenidos en el estudio sobre los 30 primeros juicios por jurados en el Chaco que tuvieron lugar entre noviembre de 2019 y febrero de 2023.
Para analizarlos, obtuvieron descripciones de los casos, partes y jurados. Hubo cuestionarios para esos tres grupos, pero además focus groups con jurados y entrevistas extendidas con jueces y partes.
Los resultados aún están siendo analizados, por lo que algunos números pueden cambiar. Sin embargo comienzas a surgir algunos patrones. Por ejemplo: 24 de los 30 juicios analizados concluyeron con veredictos de culpabilidad por los delitos más graves, cinco fueron de no culpable y uno se estancó. En siete juicios hubo más de un acusado y muchos incluyeron múltiples hechos sobre los que el jurado tuvo que decidir.
Los jurados que completaron el cuestionaros se dividieron prácticamente por género con dos personas no binarias y la mayoría tenía al menos educación secundaria. Cerca de la mitad trabajaba a tiempo completo y consideraba como “regular” o “buena” su situación económica.
Hans y Romano indicaron por otra parte que sólo unos pocos jurados sabían algo sobre el sistema de jurados en Chaco cuando fueron convocados por primera vez. La mayoría dijo que sabía poco o nada. Se embarcaron en sus tareas con un conocimiento mínimo sobre el nuevo sistema de jurado. También sabían poco sobre el caso.
La mayoría abrazó esta nueva experiencia cívica con entusiasmo y pocos se molestaron. Seis de cada diez estaban bastantes o muy entusiasmados.
En tanto que los jurados eran más propensos que los jueces a calificar el juicio como complejo, pero un número significativo de jueces también calificaron sus juicios como complejos.
Aunque los jueces y jurados calificaron un número significativo de juicios como complejos, a la mayoría de los jurados no les resultó difícil comprender las pruebas del caso, precisaron las investigadoras.
Además, la mayoría de los jurados dijeron que no tienen dificultades para entender al juez, a los abogados e incluso a los peritos.