El oficialismo aceleró el tratamiento parlamentario del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que autorizó un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y convocó a la comisión bicameral de Trámite Legislativo para este jueves a las 13.30.
El Gobierno busca conseguir una rápida aprobación de la Cámara de Diputados para blindar la normativa. Por eso, no aguardaron a los plazos que establece la ley que regula el tratamiento legislativo de los DNU y ya el mismo día que se publicó en el Boletín Oficial, lo remitieron al Congreso.
Según habían pronosticado desde el Senado, la idea era que la comisión se reúna recién el próximo martes. La aceleración repentina se debe a que, al margen de la inminencia de cerrar el acuerdo con el organismo internacional, mañana también se reúne la comisión de Acuerdos para destrabar el dictamen de rechazo de Manuel García Mansilla, el flamante juez de la Corte que fue designado en comisión.
La actividad parlamentaria en el Senado mañana será definitoria. Con respecto del DNU, el Gobierno puede llevarse la buena noticia de que haya un dictamen favorable de la comisión: la mitad de los integrantes de la Bicameral son aliados y, además, el senador que la preside, Juan Carlos Pagotto (LLA), tiene el poder de desempatar en caso de que sea necesario. Sin embargo, todavía no está garantizado que vayan a despacharlo mañana.
Dependerá de lo que decida hacer, principalmente, el senador Francisco Paoltroni, exlibertario que suele actuar como opositor del Gobierno desde que dejó el bloque. Sin él, las ocho firmas pueden completarse con la voluntad de los radicales Francisco Monti (diputado) y Víctor Zimmermann (senador): si bien la UCR reaccionó reacia a que el acuerdo haya sido por decreto y no un proyecto de ley, esos alfiles no fallan en colaborar con las intenciones del oficialismo.
Lo mismo se puede esperar del amarillo Diego Santilli, muy cercano al presidente Javier Milei. A pesar de las críticas del mismo Mauricio Macri, el diputado hoy alegó que el nuevo programa con el Fondo “es el camino”, en línea con el objetivo de fortalecer las reservas del Banco Central (BCRA). También aportará el senador Luis Juez, quien abiertamente se reconoce más cercano a Milei que al propio Macri y dejó la presidencia del bloque.
El senador correntino Carlos “Camau” Espínola, del interbloque de Provincias Unidas, es otro de los aliados del Gobierno que ya ha manifestado la voluntad de integrar las listas violetas y se espera que cuenten con su firma para aprobar el DNU. Queda el diputado Oscar Zago, el exlibertario del MID, y el diputado de La Libertad Avanza, Lisandro Almirón.
Conseguir el dictamen favorable, de todos modos, no es una aprobación asegurada: si bien una señal positiva del Congreso va a ser importante, el objetivo es habilitar que se pueda elevar a Cámaras con mayoría simple. El Gobierno está confiado que conseguirá los 129 que necesita para aprobarlo y, así, blindarlo: un DNU necesita solamente el aval de una Cámara para mantenerse en pie.
Los bloques aliados ya anticiparon que no quieren hacerla fácil y, así como Macri recriminó que todavía no hay un Presupuesto actualizado, desde la bancada que preside Rodrigo De Loredo también insistieron que van a volver a insistir sobre que se reactive ese debate. No va a tener éxito, según ya anticiparon de Casa Rosada, pero en estos casos no asoma ser un condicionante.
Sí lo será para los otros bloques más ásperos, como Encuentro Federal, la bancada que comanda Miguel Ángel Pichetto: el diputado Nicolás Massot tiene su lugar en la comisión Bicameral, y adelantará una postura. Los alfiles del gobernador Martín Llaryora (Córdoba) puede que colaboren con el oficialismo, pero el Gobierno va a necesitar de muchas más voluntades para conseguir el número.
Sin Democracia Para Siempre, los radicales díscolos que ya repudiaron la medida junto a Unión por la Patria y la Izquierda, deberán buscar algunas adhesiones de la bancada de Pichetto, Innovación Federal y la Coalición Cívica, descontando que los bloques aliados más chicos siempre se suman a construir el frente de defensivo de Milei: las sanjuaninas de Producción y Trabajo, la tucumana Paula Omodeo, los tucumanos de Independencia (de Osvaldo Jaldo), y los del MID.
Por otra parte, el Senado también tratará mañana el dictamen de Mansilla. La reunión que convocó la senadora Guadalupe Tagliaferri a las 11 tiene el objetivo de validar la firma del senador José Mayans, de Unión por la Patria, quien completaría la novena firma que necesitan para dictaminar el pliego del catedrático. El punto es conseguir el dictamen para poder rechazarlo definitivamente en una sesión sin incorporarlo sobre tablas (para eso, requerirían dos tercios). El otro candidato que se debatirá, Ariel Lijo, ya obtuvo dictamen. Podrán voltearlos con mínimo 25 votos.