Un hombre imputado por amenazar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner durante una protesta frente al Instituto Patria la tarde del 21 de julio pasado fue detenido este viernes por la Policía Federal Argentina, informaron fuentes policiales.
El fiscal en lo criminal Leonel Gómez Barbella había pedido la detención al juez que lleva la causa, Manuel de Campos, a quien también solicitó citar a declaración indagatoria a una agente de la Policía de la Ciudad que ese día estuvo a cargo de la seguridad en el lugar, informaron a Télam fuentes judiciales.
Gómez Barbella actúa como fiscal en el marco de una denuncia de oficio presentada por su colega Mónica Cuñarro y que quedó sorteada en el juzgado de De Campos.
La detención, que realizaron agentes federales del Departamento Inteligencia Contra el Crimen Organizado, se hizo por el presunto delito de “amenaza coactiva agravada”.
Gracias a las investigaciones, los agentes policiales pudieron determinar que el hombre buscado es un argentino de 64 años y se ocultaba en el hotel “Titán” ubicado en la calle Moreno 3.100, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
De esta manera, con las pruebas aportadas por los investigadores el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 5 a cargo de Manuel Arturo De Campos, se ordenó el allanamiento del lugar donde se logró la notificación del investigado y el secuestro de un teléfono celular, cuatro pendrives, carteles utilizados en las manifestaciones y un camisolín sanitario blanco, que portaba el día del hecho que se investiga.
Los elementos personales del hombre acusado quedaron bajo custodia policial y a disposición del magistrado interventor en la causa caratulada “amenazas”.
En el dictamen remitido al juez De Campos, el fiscal consideró que hay elementos para sostener que se “incitó a desórdenes sociales a los gritos en la vía pública expandiendo sus graves amenazas por medio de un megáfono hacia la Vicepresidenta, su hijo y sus partidarios”.
“El encartado amenazó para alarmar o amedrentar a otro, en la especie a la Dra. Fernández de Kirchner, infringiéndole un mal dependiente en todo o en parte de su voluntad”, agregó el dictamen del fiscal.
En ese sentido, “la amenaza fue idónea para alarmar o amedrentar a la Vicepresidenta, en lo que hace a la idoneidad en sí misma de la amenaza”, sostuvo.
Por los mismos incidentes, el Instituto Patria radicó otra denuncia por “intimidación y amenazas” en los tribunales federales de Retiro.
En su denuncia, la fiscal sostuvo que en la tarde del 21 de julio, frente al Instituto Patria, en Rodríguez Peña 80 y “mientras un grupo de personas se encontraban manifestando en la calle”, el ahora imputado “profirió a través de un megáfono reiteradas frases amenazantes, de gravedad y de tenor intimidatorio a Cristina Fernández de Kirchner con el claro propósito de que abandone sus funciones como Vicepresidenta”, según el texto al que tuvo acceso Télam.
En la denuncia, la fiscal detalló que todo ocurrió frente a al menos dos efectivos de la Policía de la Ciudad.
Los agentes “pese a esas frases intimidatorias, no solo no detuvieron el accionar flagrante dando intervención al fiscal nacional en turno” sino que con uno de ellos mantuvo “una platica de conocimiento anterior”.
El acusado “saludó con un puño” a uno de esos policías y luego continuó con las amenazas a través del megáfono, agregó la denuncia.
“Dichos acontecimientos, a mi juicio, constituyen los delitos de amenazas coactivas, que concurren idealmente entre sí y a su vez con el delito de intimidación pública”, sostuvo la fiscal denunciante.