Donald Trump anunció que planea suspender el ingreso a Estados Unidos de personas provenientes de “países del tercer mundo”, un día después de que un ciudadano afgano disparara contra dos guardias nacionales a metros de la Casa Blanca.
“Suspenderé permanentemente la migración desde todos los países del tercer mundo para permitir que el sistema estadounidense se recupere por completo”, escribió el mandatario republicano en un extenso mensaje publicado en redes sociales durante la madrugada de este viernes en la Argentina.
También amenazó con revocar “millones” de visados otorgados durante el gobierno de su predecesor, Joe Biden, y con “expulsar a cualquiera que no sea un activo neto para Estados Unidos”.
Trump afirmó además que eliminará todas las prestaciones y subsidios federales para quienes no sean ciudadanos, y que deportará a cualquier extranjero que represente un riesgo para la seguridad o que “no sea compatible con la civilización occidental”.
La publicación, que cerraba con un mensaje por el Día de Acción de Gracias, marca una nueva escalada en las políticas antimigratorias de su segundo mandato, centrado en una campaña de deportaciones masivas.
“Estos objetivos se perseguirán con el fin de lograr una reducción significativa de las poblaciones ilegales y problemáticas”, completó Trump. Y concluyó: “Solo la migración inversa puede resolver completamente esta situación”.
Las fuertes medidas de Trump se conocen poco después de la muerte de Sarah Beckstrom, de 20 años, miembro de la Guardia Nacional, que fue baleada el miércoles por Rahmanullah Lakanwal, un ciudadano afgano que ingresó a EE.UU. en 2021 con un permiso de refugiado otorgado durante la era Biden.
En el ataque también resultó herido otro oficial, Andrew Wolfe, de 24 años, quien permanece en estado crítico y pelea por su vida.
El gobierno estadounidense ya había anunciado este jueves que iba a revisar todas las visas, asilos y permisos migratorios concedidos en los últimos cuatro años.
