El nuevo esquema permitirá que los consumidores paguen directamente en dólares desde sus cuentas bancarias. Para ello, es indispensable contar con una caja de ahorro en esta moneda y vincularla a la tarjeta de débito. No será necesario obtener una nueva tarjeta, ya que las actuales servirán tanto para pesos como para dólares.
Los comercios interesados deberán abrir cuentas en dólares y adecuar sus sistemas de cobro. Desde Fiserv adelantaron que los puntos de venta estarán operativos para febrero, mientras que los sistemas de pago con códigos QR se habilitarán en abril.
Para el cliente, el proceso es sencillo: al pagar, se selecciona la moneda en la terminal POS. La operación se debita directamente de la cuenta en dólares, sin conversiones. Sin embargo, no podrán utilizarse fondos de cuentas CERA ni billeteras virtuales.
Si bien el sistema presenta limitaciones, como la falta de integración con criptoactivos, representa un paso hacia la ampliación del abanico de opciones de pago en la economía argentina. El consumidor podrá elegir en qué moneda gastar, pero también deberá decidir si el dólar será su nuevo peso. Por ahora, todo está en manos de la aceptación del mercado y de la voluntad de los ahorristas.
