El gurú de la productividad Tiago Forte lanzó una nueva herramienta que rompe con sus métodos tradicionales: la Death Clock, una calculadora que estima la fecha de tu muerte en base a 17 variables personales, como los hábitos de sueño, alimentación y ejercicio físico. El objetivo no es generar miedo, sino provocar una reflexión profunda: ¿estás usando bien tu tiempo?
Forte, creador del popular método del “segundo cerebro”, no programó la aplicación por sí mismo. Utilizó inteligencia artificial para desarrollarla en pocas horas, con ayuda de un asistente automatizado. El resultado es un memento mori digital que muestra en pantalla una estimación de cuánto te queda por vivir.
Lejos de ser una predicción médica, la Death Clock funciona como una herramienta de conciencia. Al modificar los hábitos de vida —por ejemplo, pasar de sedentarismo a ejercicio diario— la fecha estimada se actualiza, reflejando cómo las decisiones cotidianas pueden extender o acortar la vida proyectada.
Para Forte, la productividad no se mide por la cantidad de tareas completadas, sino por el propósito con el que se vive. Saber que ya se ha consumido, por ejemplo, el 40% de la existencia cambia la perspectiva. Reuniones innecesarias, series sin sentido o tareas postergadas se ven bajo una nueva luz. Cada día cobra un valor distinto cuando se lo percibe como uno menos, no uno más.
El mensaje de fondo no apunta a fomentar la ansiedad, sino a invitar a vivir con más intención. La Death Clock no busca ser precisa, sino útil. Su función es recordar que el tiempo es finito y que vale la pena gastarlo en lo que verdaderamente importa.