Israel ha bombardeado este sábado otro edificio de gran altura en Ciudad de Gaza, alegando que era “utilizado por Hamás” y que el grupo había “establecido infraestructura subterránea” en sus alrededores. Según el comunicado militar israelí, “terroristas de Hamás instalaron equipos de inteligencia y establecieron puestos de observación en el edificio para monitorear la ubicación de las tropas en la zona”.

Se trata del segundo edificio de gran altura bombardeado en las últimas 24 horas, en el marco de una nueva campaña de ataques aéreos para hacerse con el control total de la ciudad. Previamente, el Ejército israelí envió órdenes de desplazamiento a residentes de varios barrios específicos, incluyendo los bloques 726, 727, 784 y 786, así como el edificio Al Ruya y las tiendas de campaña adyacentes.

Establecimiento de nueva zona humanitaria

Las autoridades israelíes han anunciado la creación de una nueva zona humanitaria en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, pese a que ya está abarrotada de desplazados gazatíes. Esta zona se suma a la ya existente en la zona costera de Mawasi, que se ha convertido en un enjambre de tiendas de campaña donde miles de palestinos malviven sin luz ni agua.

Según el Ejército israelí, la nueva área “incluye infraestructura humanitaria vital, como hospitales de campaña, tuberías de agua e instalaciones de desalinización“, además del suministro continuo de alimentos, medicamentos y suministros médicos coordinados con la comunidad internacional. Sin embargo, las agencias internacionales han advertido que no queda espacio en muchos de estos lugares.

Escalada de violencia y balance de víctimas

Durante la madrugada, al menos seis palestinos murieron a causa de los bombardeos israelíes mientras esperaban recoger comida. Uno de los incidentes más graves se produjo cerca del punto de distribución de ayuda en Wadi Gaza, donde dos personas murieron y cerca de una veintena resultaron heridas. También se reportó la muerte de un niño en un ataque de artillería en Ciudad de Gaza y de un anciano por disparos de tropas israelíes en la zona de Mawasi.

El Ejército israelí ha anunciado que controla ya el 40% de Ciudad de Gaza y que en los próximos días pondrá en marcha una campaña de bombardeos contra los últimos edificios de gran altura que permanecen en pie en la capital gazatí.

Según datos de Hamás, alrededor de 64.300 palestinos han muerto desde el inicio de la ofensiva israelí, y 162.000 han resultado heridos, con miles de víctimas que permanecen bajo los escombros.

Según palabras de Trump, EE.UU. se encuentra en conversaciones avanzadas para que Hamás libere a los rehenes, uno de los requisitos de Netanyahu para terminar la guerra. Benjamin Netanyahu ha confirmado que “No se acabará la guerra hasta que acepten las condiciones de Israel”.