El gobierno de Donald Trump decidió eliminar de aranceles a teléfonos inteligentes, computadoras y otros dispositivos electrónicos, en una medida que buscar atenuar el golpe económico para los consumidores estadounidenses en medio de la guerra comercial con China.
La decisión fue comunicada el viernes por la noche por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. La medida exime del arancel adicional del 145% a una serie de productos electrónicos que ingresan a Estados Unidos desde China, incluyendo smartphones, monitores de computadora, semiconductores y otros componentes fundamentales para la tecnología de consumo.
La medida, difundida el viernes por la noche por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, abarca diversos productos electrónicos, como teléfonos inteligentes y componentes que ingresan a Estados Unidos desde China, sujeta ahora a un arancel adicional del 145%.
Entre los productos exentos también figuran teléfonos inteligentes, monitores de ordenador y diversas piezas electrónicas. Los semiconductores también están excluidos de un arancel “base” del 10% para la mayoría de los socios comerciales.
Según el comunicado, la medida alcanza a los productos que ingresan al país o sean despachados desde depósitos estadounidenses a partir del 5 de abril.
Los aranceles anunciados por la administración Trump tienen un impacto directo en empresas como Apple, cuyo ecosistema productivo depende fuertemente de la fabricación en territorio chino.
Aproximadamente el 90% de la producción y ensamblaje del iPhone de Apple se realiza en China, según estimaciones de Wedbush Securities citadas por CNN.